sábado, julio 25, 2009

The Savages


Una nueva película. Un nuevo espacio para reflexionar sobre temas profundos, casi cotidianos, con toques de humor y llanto. “La familia Savage” relata la historia de dos hermanos (Laura Linney y Philip Seymour Hoffman) que deben hacerse cargo de su padre, a quien no ven hace más de veinte años. La vida de estos dos personajes se convierte en un producto de su propia historia, caracterizada por el abandono, la inseguridad para formar una familia y la falta de coraje para cambiar el curso de una vida estancada. El humor del reír por no llorar le da un plus de frescura a un film de naturaleza dura. Wendy y Jon internan a su padre en un asilo para ancianos, visitándolo diariamente. Ella, cargada de culpa. Él, invadido por el recuerdo de una vida sin abrigo. En el medio, un padre con demencia, que prácticamente no reconoce lo que lo rodea, pero que percibe y sufre las circunstancias de una realidad deprimente. Tamara Jenkins, una joven directora que también escribe esta historia, plasma en imágenes los sentimientos de desarraigo. Colores vacíos de entusiasmo se apropian de la fotografía del film, mientras la música se complementa con silencios, y estos con las miradas de los protagonistas. Un film cuya última imagen plantea la moraleja de la historia, la sensación de sus personajes, el intento de no tropezar dos veces con una piedra angustiante. Una búsqueda de redención, de demostrar que la vida es vida de comienzo a fin.

sábado, julio 04, 2009

Into the wild


Voy a incluir una nueva faceta a esta figura de lados múltiples que representa este blog. Cada tanto, y si el film lo amerita, voy a incluir una crítica, una mirada acerca de aquellas imágenes y sonidos que me hayan hecho reflexionar. Ante la recomendación de un amigo, me digné a observar (tengan en cuenta la diferencia con el verbo “ver”) una película del año 2007, dirigida por Sean Penn, que se titula Into the wild. Es curioso que una película genere en el espectador ganas de tomar actitudes instantáneas. Eso es lo maravilloso y lo subjetivo del cine. Es tan difícil recomendar películas, porque cada trama toca sensiblemente de maneras diferentes a cada persona. Into the wild es la historia real de un joven, recién recibido de la Universidad, criado entre las bonanzas de una familia adinerada a la que nunca le falto nada material. Creo que la película analiza la vida (o por lo menos un aspecto de ese todo tan inmenso) de diferentes maneras. El film se realiza preguntas todo el tiempo y trata de responderlas chocando con la realidad. Este joven siente un vacío, una necesidad de buscar el complemento vital, aquel que brinda soluciones a los interrogantes propios. Chris decide escapar de su vida para comenzar una nueva, alejado de todo lo que hasta ese momento le había tocado vivir. A partir de ese momento, el film se divide en capítulos, que tranquilamente resumirían toda la vida de una persona: el nacimiento, la adolescencia, la familia y la sabiduría. Como todo nacimiento, este joven cambia su nombre, sus objetivos, su entorno, y emprende un viaje en soledad con un objetivo conciente y otro inconciente. Ese recorrido lo lleva a inmiscuirse en los avatares de la naturaleza, en sus bellezas, en sus traiciones, en sus vicisitudes y claridades. Atraviesa todo tipo de paisajes. La fotografía del film es magnífica, aunque sean los colores, contrastes y luces de la naturaleza misma. Me atreví a anotar diferentes palabras mientras observaba la película. Algunas sin sentido, pero con sentido en sí mismas, si saben de lo que hablo. Alex Supertramp es su nueva identidad, su reborn. Una persona cuyos objetivos se basan en buscar objetivos, cuyas preguntas se basan en formularlas y responderlas con nuevas experiencias. Busca el sentido de la libertad, de la verdad, de la felicidad. No voy a recorrer paso a paso la película, pero sí a dejar impresiones. En el transcurso del film conoce gente con la cual establece lazos fuertes y con los que convive y aprende durante un tiempo determinado. Pero él sabe que su trayecto y sus respuestas se encuentran en soledad, continuando su camino, adentrándose en la naturaleza, la cuna de las respuestas. Cada uno de estos lazos bien pueden representar los vínculos que uno establece durante toda su vida. Su mensaje y su nueva visión marcan una profunda huella en cada una de estas personas, desde una pareja de hippies, pasando por una joven que se enamora de él perdidamente, hasta un solitario anciano al cual le enseña a vivir. Cuando todos le preguntan hacia donde va, Alex les dice: “hacia el norte, hacia Alaska”. El film está montado en forma paralela, o sea que nos muestra imágenes del presente (él en Alaska), combinando con su largo trayecto hasta ese lugar. En Alaska él vive junto al río, en un “autobús mágico” destartalado que pronto se convierte en su nuevo hogar. Debe aprender a valerse por si mismo, a alimentarse, a luchar contra la fuerza de la naturaleza, que se muestra independiente y autoprotectora, tanto como él. La música protesta y busca respuestas junto a él. Las melodías se complementan con los silencios. Porque el silencio da respuestas, al igual que el viento, el blanco de la nieve, la gota de la lluvia, y el frío de la montaña. El problema surge cuando las propias respuestas no te dejan llevar a cabo el operativo retorno, cuando la naturaleza decide que uno es parte de ella y que no hay vuelta hacia atrás, y cuando las mismas respuestas confunden hasta el punto en que uno descubre su propia verdad cuando no hay marcha atrás. No les voy a contar el final de la película, sólo me gustaría agregar algunas frases más. No hay que ser fuerte, hay que sentirse fuerte. Se busca la verdad, porque las mentiras golpean la identidad. Pero la verdad está en uno mismo y en las respuestas a las propias y únicas preguntas. ¿La búsqueda en soledad de las respuestas implica egoísmo? Interesante pregunta acerca de cómo uno debe encarar su vida. Cómo afecta esta búsqueda a aquellos que se preocupan por nosotros y cuánto nos importa lo que a ellos les afecta. La mejor frase de la película la escribe él en su cuaderno, aquel en el que anota cada de uno de sus momentos, cada una de sus reflexiones, cada una de sus nuevas experiencias de vida. Véanla y después me cuentan sus impresiones.