miércoles, febrero 11, 2009

Silencio


La Real Academia Española define al silencio como la abstención de hablar o la falta de ruido. Se aprecia la idea del silencio como una falta de algo y no como una necesidad.
Son pocos los que lo aprecian como tal. Son aquellos que no cierran los ojos por miedo a la oscuridad, por miedo a que la pausa les de la respuesta.
Porque a pesar de que generalmente la palabra “respuesta” tiene connotaciones positivas, otras veces puede ser cruelmente reveladora. Ante semejante amenaza, la víctima de la respuesta prefiere suplir el espacio del silencio con sonidos vanos, sin saber que uno no puede escapar del silencio, porque este se encuentra a la expectativa de cada movimiento propio. Ni siquiera la sombra tiene tal poder de acechamiento.
Entonces surgen reacciones disímiles. Están las personas que huyen de esta persecución y están aquellos que la enfrentan, conviviendo. De esta manera, probablemente el efecto sobre nosotros sea menos perjudicial. Es como cuando queremos evitar preguntas complicadas. Si no las respondemos, siempre van a estar ahí, esperando una respuesta. En cambio si nos atrevemos a responderlas, sin importar quién sea nuestro interlocutor, la ansiedad de este y la nuestra va a estar satisfecha.
Entonces el silencio se presenta ante nosotros como una sucesión ilimitada de imágenes que recorren nuestra mente y es en ese momento cuando buscamos descifrarlas. La decodificación de las imágenes se convierte en la clave de la convivencia, en la respuesta directa ante la pregunta engorrosa. El cielo se vuelve más claro, los pensamientos recuperan pureza y los sonidos vuelven a su hábitat natural en el momento oportuno. Porque ser inoportuno significa tirar la mugre debajo de la alfombra. Es verdad, decir o escribir es más sencillo que hacer, pero la idea está y solo es cuestión de convivir un poco más con nuestros silencios para poder enfrentar la oscuridad.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Adivinanza:
"Si me nombras, dejo de existir"

Anónimo dijo...

Hola patito, me gustó la nota, es interesante, y creo que muchas veces el silencio dice más que muchas palabras que te puedan decir... como dicen por ahi "el silencio puede ser ensordecedor"
y a veces lo es, más cdo uno está solo y en el silencio la cabeza maquina más rápido y se te cruzan muchas cosas a la vez...
Será por eso que a la noche me duermo con música? A fin de evitar que mi mente me recuerde los problemas que un o tiene?

Un beso

Unknown dijo...

"[...] La muerte ha restituido al silencio su prestigio hechizante. Y yo no diré mi poema y yo he de decirlo. Aún si el poema (aquí, ahora) no tiene sentido, no tiene destino. ..."
Alejandra Pizarnik.

Ahahaha, llegué de casualidad y leí esto y me acordé de los fragmentos para dominar el silencio de Pizarnik.

Muy bueno, ciertamente, estuve mirando un poco todo y me quedé encantada.

Saludosss :)

Unknown dijo...

http://www.literatura.org/Pizarnik/domsilencio.html

Te dejo el link para que puedas leer el texto completo :)
Yo soy una madre bastante abandónica de mi propio blog, pero cada tanto le pongo pilas. Nos estaremos visitando nuevamente.
Beso!

Lola dijo...

Es que el silencio mismo es oscuridad para mucha gente.

Estar en silencio significa, entre otras cosas, dejar de recibir estímulos auditivos. O sea que si corto la música, los ruidos, las voces que llegan hasta mí, se empiezan a escuchar todos esos sonidos que antes estaban tapados por el ruido. Y esos sonidos, pueden ser las voces interiores, la conciencia, las preguntas de uno mismo, las ideas, las acusaciones... tantas cosas que salen a flote cuando apagamos las radios exteriores....